Esta es una de esas historias que preferirías creer que no ocurre en nuestros tiempos ni en los que creemos “países civilizados”, pero desgraciadamente esta ocurriendo ahora y en Londres.
Durante las vacaciones escolares del verano pasado, dos hermanos de 8 y 9 años le explican a su madre que en el colegio han estado sufriendo regularmente abusos sexuales y participando en rituales junto con otros niños. Se trata de la escuela Christ Church Primary School, situada en Hampstead, un barrio de clase media alta del norte de Londres. Entre los participantes nombran a su propio padre, profesores y personal de la escuela, otros padres, el párroco, policías y miembros de los servicios sociales.
Ante tan graves hechos, la madre informa a la policía del Reino Unido y toman declaraciones a los niños por separado el pasado 5 de septiembre. Vuelven a explicar la misma historia y con todo lujo de detalles.
El 11 de septiembre los niños son entrevistados de nuevo por la policía dando la misma versión de los hechos, pero son retenidos por la policía impidiendo que la madre se los lleve de vuelta a casa. En los exámenes médicos practicados a los dos niños por la Dra. Deborah Hodes en The University Collage Hospital en Londres se encuentran lesiones que confirman los daños denunciados por los niños y que son compatibles con la historia de abusos que los niños cuentan.
Después de 6 días en custodia de los servicios sociales, los niños son entrevistados de nuevo el 17 de septiembre por la policía y se retractan de las acusaciones.
A fecha de hoy no se ha abierto ninguna investigación criminal contra el padre ni el personal de la escuela. El 22 de septiembre se cierra el caso por falta de crimen.
Los niños siguen en servicios sociales, no pueden ver a la madre, pero el padre tiene concedido un régimen de visitas, si, si, no me he equivocado, el mismo padre que los niños acusan de abusar de ellos desde pequeños y que no ha sido investigado.
La madre se ha visto obligada a huir a Europa después que 10 policías irrumpieran en su casa sin ninguna orden judicial. Afortunadamente su abogado se encontraba con ella y pudo parar la invasión ilegal.
La representante legal de la madre, Sabine McNeill, se ha visto obligada a huir a Alemania tras ser amenazada por las autoridades locales en el Reino Unido.
Para los que queráis ampliar o contrastar información y os manejéis bien con el inglés, todos los videos de las declaraciones de los niños tanto a la policía como a la madre se pueden ver en la red, así como el informe médico y el informe policial de clausura del caso.
Muchos os estaréis preguntando como puedo saber que esta historia es real o una invención de los niños o una perversa manipulación por otras personas o esto o aquello.
Obviamente no lo sé, pero sí veo muy claro que no hay ningún interés por parte de las autoridades en investigar los hechos sino en silenciarlos, lo cual ya nos da cierta información. Tampoco es un caso aislado y la voluntad de silenciar se esta repitiendo, podéis echar un vistazos a casos como Hollie Greig y Melissa Laird.
Y si el Reino Unido lo veis lejos recordad a las tres niñas de Alcasser, macabros hechos que no están realmente aclarados. No creo en absoluto que sean prácticas recientes, más bien al contrario, pero ya no se pueden tapar más y van saliendo poco a poco a la luz para que vayamos viendo realmente el mundo que vivimos.
Estamos gobernados por unos seres perversos y depravados, la famosa élite que envenena nuestros alimentos con transgénicos y venenos químicos, que envenena nuestra mente con la manipulación de los medios, que envenena nuestro cuerpo con los medicamentos y vacunas, el aire con los chemtrails, el ambiente en general con las ondas de los móviles, líneas eléctricas, electromagnetismo, que crean guerras solamente para aumentar el sufrimiento humano y de paso ganar unos buenos dinerillos vendiendo armas o controlando el petróleo de este o aquel país.
Y además, ahora también nos enteramos que torturan y utilizan nuestros niños para sus perversos y dementes intereses. ¿Hasta donde vamos a consentir?
Parece que ya hemos tocado suficientemente fondo y solo queda una dirección, quitarnos la venda de los ojos, ver la realidad del mundo que estamos viviendo. Afortunadamente muchas cosas están saliendo a la luz. Después de darle muchas vueltas, intentar entender, leer investigadores que comprenden la matrix con más profundidad que yo, creo, como muchas de estas personas apuntan, que la salida es el amor.
Y os lo explico. Estos seres que gobiernan el mundo son especialistas en dolor, sufrimiento y perversión y necesitan esta baja energía para vivir.
Así pues, podemos invadir el mundo de amor, no luchar entre nosotros, no crearnos sufrimiento los unos a los otros porque esta es la energía que esta alimentando estos seres en la oscuridad.
Podemos crear un mundo con una energía que les resulte imposible vivir, que se estén “muriendo de hambre de sufrimiento” y tengan que buscarse otra “casa” más acorde a su modo de vida. En la vibración del amor podremos por fin evolucionar y expandir el enorme potencial que tenemos.
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