Por Celeste Fassbinder / BWN Argentina
Profesional de la Salud en Inmunología (PhD) escribe una carta abierta a los funcionarios políticos que pretenden obligar a la población a un calendario de vacunas.
Estimado Legislador: “Mi nombre es Tetyana Obukhanych. Tengo un doctorado en Inmunología. Le escribo esta carta con la esperanza de que corrija varios errores de percepción comunes sobre las vacunas con el fin de ayudarle a formular una comprensión justa y equilibrada que apoyada en la ciencia y los nuevos descubrimientos científicos”.
En su carta, da precisiones sobre los mitos de las vacunas contrastándolos con la verdad científica.
Vacuna antipoliomielítica: No puede evitar la transmisión del virus de la polio (ver apéndice para el estudio científico, artículo # 1 – Enlazado como fuente). El virus no existe hace dos décadas. Incluso si este virus fuera transportado a una nación por viajes, la vacuna contra la polio no puede garantizar la seguridad en espacios públicos. Dicho sea de paso, la erradicación de este virus es atribuido a una vacuna anterior y no la que ustedes imponen.
El tétanos no es una enfermedad contagiosa, sino que adquirida por punción y/o heridas profundas con un objeto contaminado con esporas de C. tetani. La vacunación contra el tétanos (a través de la vacuna combinada DTaP) no puede alterar la seguridad de los espacios públicos; presuntamente se limita a la protección personal.
Toxina de la difteria, la vacuna toxoide de la difteria (también contenida en la vacuna DTaP) no está diseñada para prevenir la colonización y la transmisión de C. diphtheriae. La vacunación contra la difteria no puede alterar la seguridad de los espacios públicos; dado que igualmente está destinada a la “protección” personal.
La tos ferina acelular (aP) vacuna (el elemento final de la vacuna combinada DTaP), actualmente en uso., sustituye la vacuna contra la tos ferina de finales de 1990, que detonó un resurgimiento sin precedentes de la tos ferina. Asimismo, un experimento con la infección deliberada de tos ferina en primates reveló que la vacuna aP no es capaz de prevenir la colonización y la transmisión de B. pertussis (ver apéndice para el estudio científico, artículo # 2 – Enlazado como fuente). La FDA ha emitido una advertencia sobre este hallazgo crucial. [1 Enlazado como fuente]
Por otra parte, la reunión de 2013 del Consejo de Asesores Científicos de los CDC reveló datos alarmantes adicionales sobre variantes de pertussis (cepas-PRN negativo) que circulan actualmente en los EE.UU.. Esta cepa habría adquirido una ventaja selectiva para infectar únicamente a los vacunados… (véase el apéndice del documento CDC, artículo # 3 – Enlazado como Fuente), lo que significa que las personas vacunadas son más propensas a ser infectadas, y por lo tanto a contagiar, en contraste con las personas que no fueron vacunadas.
Las vacunas contra la gripe causaron una enfermedad invasiva de alta gravedad y mayor incidencia en adultos, pero sin embargo insisten con vacunar a los niños (ver apéndice para el estudio científico, artículo # 4 – Enlazado como fuente)
Fuente: Vaccine Legislation: Discrimination Against Unvaccinated Children Unwarranted, No Public Health Risk
Finalmente, la presunta hepatitis B sería un virus de transmisión sanguínea. No se propaga en un entorno comunitario, especialmente no entre los niños que tienen pocas probabilidades de involucrarse en comportamientos considerados de “alto riesgo”, como el uso compartido de agujas o el sexo. Además, la admisión escolar no prohíbe niños con “hepatitis B crónica”.
Importante leer: Durante 1990-1998 hubo reportes de 54 muertes por año, por causa de la vacunación “contra la hepatitis B”. “El total descrito por el VAERS indica 24.775 informes efectos adversos a la vacuna “contra” la hepatitis B a partir de julio 1990 al 31 de octubre de 1998 indicando 439 muertes y 9.673 reacciones graves relacionadas a urgencias, hospitalización, incapacidad o muerte.” – Michael Belkin
Cualquier Ley que discrimine a los niños no vacunados es irrazonable e ilógica.
La profesional Tetyana Obukhanych con un doctorado en inmunología cuestiona las leyes actuales sobre vacunas preguntando si se trata de “proteger la salud pública o simplemente discriminar y penalizar injustamente a los objetores conscientes de las vacunas”, el articulo completo enlazado arriba es más que interesante. Además informa que la mayoría de los “nuevos brotes” de enfermedades fueron detonados por vacunas.
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