En Perú, el biólogo marino Stefan Austermuhle se infiltró en las embarcaciones de pescadores que cazan delfines de manera ilegal para usarlos como carnada de tiburones.La carne y la grasa de los delfines son utilizadas como carnada para la caza de tiburones. Cazar tiburones está permitido, siempre y cuando midan más de 1 metro 60 centímetros de largo, aunque los pescadores no respetan estas condiciones.
Según Austermuhle, cada año mueren asesinados de 5 mil y 15 mil delfines, a pesar de que está prohibida su extracción y comercialización desde 1996. De acuerdo con el biólogo y activista, ni siquiera en los países donde está permitida su pesca llegan a matar tantos delfines como en Perú.
Tras conocerse esta denuncia, las autoridades afirman que está investigación no tiene ningún sustento técnico ni científico que pueda avalar las cifras. El biólogo Stefan Austermuhle defendió la veracidad de sus investigaciones.
El estado ha conformado una comisión multisectorial presidida por el Ministerio del Ambiente, con la finalidad de abordar denuncias como las presentadas sobre la caza ilegal de delfines.
Hispan Tv
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