viernes, 10 de enero de 2014

Pese a la polémica, se extiende el uso de la marihuana con fines medicinales

Francia ha lanzado un medicamento a base de marihuana y el uso de ésta en Argentina es común entre las personas mayores. El reportero de RT Ignacio Jubilla traslada los argumentos de defensores y detractores del uso de esta polémica sustancia.

Noemí Olivetto es consumidora habitual de marihuana con fines medicinales. Esta argentina, psicóloga de casi 60 años de edad, sufre fibromialgia, una enfermedad crónica que causa dolores, rigidez muscular y fatiga. Durante seis años su padecimiento fue en aumento, bajo tratamientos tradicionales que no surtían efecto. En medio de la desesperación, la recomendación de un amigo la acercó al cannabis: “Y bueno, pruebo marihuana… Y fue maravilloso [...]. Se empezaban a ir las contracturas. Me sentí tan feliz…”.
Sebastián Basalo es fundador de la revista ‘THC’, la primera publicación de cultura cannábica en Argentina. El propio Basalo confiesa que se sorprendió al descubrir cómo la marihuana fue creciendo como alternativa medicinal entre adultos muy mayores.
“Hicimos una tapa sobre ‘Viejos verdes: El porro en la tercera edad’ contando este fenómeno. Y a partir de ahí tuvimos una avalancha de personas mayores que nos escribieron a la revista pidiendo más información”.
Para la comunidad médica, la polémica está servida. Existen algunos medicamentos que contienen derivados de la planta, pero su uso directo está lejos de tener una aceptación consensuada. No faltan profesionales que animan a sus pacientes a consumir esta sustancia, algo que otros consideran una aberración, que pone en serio riesgo la salud, entre otras cosas, debido a sus agentes cancerígenos.
Así, según el psiquiatra Eduardo Kalina, la marihuana “es una sustancia altamente tóxica. No tiene ninguna utilidad para la comunidad, para las personas, fumar marihuana”. “En todos mis 53 años de médico no tuve nunca que recomendar marihuana. Con las diferentes metodologías modernas de abordar el dolor, logramos suficiente control”, explica el especialista.
Quienes la defienden, por su parte, acusan a los grandes laboratorios de darle “mala fama” para no perder su fuente de negocio. En este sentido, Sebastián Basalo opina que la marihuana se ha convertido en un gran territorio de disputa para la industria farmacéutica “porque es donde poseen gran parte de su clientela”.
Con la reciente legalización y regulación de la marihuana, Uruguay es el primer país en Latinoamérica en abrir un debate que pega fuerte en la mayoría de la región, donde el narcotráfico es un problema a la orden del día.
Nadie sabe con certeza si existirá el día en que pedir aspirinas y algunos gramos de cannabis se convertirá en algo habitual y generalizado en las farmacias de otros países. Lo que sí es un hecho es que sobre todo quienes la utilizan con fines terapéuticos, parecen decididos a seguir haciéndolo, dentro o fuera de la ley.
RT

No hay comentarios:

Publicar un comentario